Talavera de la Reina, 1999.
Estudié la Diplomatura de Interpretación y Técnica en el Laboratorio Teatral William Layton de Madrid, con profesores que dejaron huella en mí como Juan Vinuesa, Carmen Losa, Marta Matute y Chelo García. Actualmente realizo el grado en Estudios Ingleses, dos caminos que me han permitido profundizar tanto en la interpretación como en la creación y la literatura.
Seguí formándome en interpretación, verso, movimiento y dramaturgia en diferentes escuelas y profesionales como Juan Ceacero, Claudio Tolcachir, Joaquín Notario, Carlos Tuñón y Cristina Alcázar.
Después de varios montajes teatrales de Shakespeare y Molière en Talavera, dirigidos por María Salas, estrené ¿De qué te resulta imposible hablar? (Dir. Juan Ceacero) mi primer contacto con la escena madrileña. Desde entonces he participado en proyectos como De la juventud (Dir. Juan Ceacero, La_Compañía exlímite); Antes de esto, temblaba y MDA (Dir. Tomás Cabané y Tomás Pozzi, Malala Producciones); Cielo Calderón o La vida es Sueño según Lorca (dir. Sergio Adillo, Colectivo Singular) estrenada en el Festival de Teatro Clásico de Almagro; Enbor(r)rak (dir. Paula Gironi, HARREMAN); y Rafa soy yo (dir. Cristina Hermida).
En audiovisual, uno de los proyectos más significativos para mí ha sido el largometraje Un paseo por el Borne (Dir. Nick Igea), donde interpreté a Martín, el personaje protagonista, en la juventud.
Siempre he tenido el impulso de mirar más allá, lo que me ha llevado a trabajar de ayudante de dirección en varios proyectos teatrales como Esto podría durar y durar y durar y durar y durar (Dir. Tomás Cabané, Malala Producciones), Como no se pudrió… Blancanieves (Dir. Mariana Kmaid-Levy), De sexual e -idad (Dir. Paula Gironi) y varios procesos dirigidos por Sergio Adillo en el Laboratorio William Layton.